Cada gran campeón con indicios de ganar en todos los terrenos recibe siempre la comparativa con Eddy Merckx. Llena las cabeceras como “el nuevo Caníbal” Tadej Pogacar. En la reciente rueda de prensa que ofreció en la jornada de puertas abiertas del equipo en Alicante, hubo hasta tres preguntas relacionadas con Merckx a las que el esloveno respondía con escaso entusiasmo. Que el ciclista belga es el más grande de todos los tiempos es algo indudable, pero obviamos quizás la gran brecha generacional que existe entre ambos para que suscite una verdadera identificación o afinidad en los ciclistas de hoy en día. Uno nacido en 1945, otro en 1998. El ciclismo de los 70 frente al de la segunda década del siglo XXI.
Al próximo gran talento del ciclismo español, Pablo Torres, le entusiasma Tadej. Es su ídolo. Pogacar comenzó su carrera cuando Torres tenía 14 años. Por su parte, Alberto Contador inspiró a otros como Enric Mas. Y al propio Contador, Marco Pantani. Con Indurain compararon a Tom Dumoulin. Sobre Mas cayó el peso de las expectativas tras una generación dorada. Juan Ayuso, anunciaban los titulares, seguía la estela de Contador. Remco Evenepoel fue en 2019 “el nuevo Merckx” y Cavendish se empeñó en batir el récord de victorias del belga en el Tour no se sabe si para evitar que su alargada sombra le persiga durante el resto de su vida o por ambición propia.
Y es que parece que todos los caminos terminan en Merckx. Es el Zeus griego, garante de la jerarquía del ciclismo y a su trono de leyenda acuden los periodistas para nuevos titulares. “Valverde es el más parecido a mí de los españoles, sin duda”. “Contador puede ser el nuevo caníbal; le admiro”. “Pogacar solo ha ganado tres Tours, le queda mucho para ser como yo”. “Lo que logró Evenepoel - en los Juegos Olímpicos - es excepcional”. Y ahí estuvo junto a su compatriota belga en la celebración de su doble medalla olímpica en el estadio del RSC Anderlecht, honrándole pero a la vez siendo protagonista en su logro propio. Ocurre en todos los deportes, pero me esfuerzo por encontrar el caso en el que la leyenda tenga tanto espacio compartido con los campeones del presente y no encuentro el ejemplo. Quizás en comentarios podáis dejarme vuestras impresiones.
Admiro a Eddy Merckx, valoro su peso en la historia pero no soy amiga de las comparaciones aunque sean inevitables en el deporte; quizás podrían ser un recurso menos recurrente. Por eso, admiro el discreto segundo plano que adoptó Miguel Indurain cuando se retiró -e incluso durante toda su carrera- y valoro que cuando a Joxean Fernández “Matxín”, manager del UAE le pregunte por Pablo Torres, me responda: “Pablo es Pablo y que nadie le obligue a ser lo que no es”. Por cierto, un dato muy interesante: me contaba Matxín que si el margen de mejora habitual del ciclista es del 5% en el caso de Pablo Torres es del 30%. Se emocionaba el vasco al hablar de él y daba otro porcentaje: “Si como corredor fuese el 1% que es como persona, sería el mejor del mundo. Excepcional, es un 1000 sobre 10”. Y tampoco aquí hay comparativa posible.
Extra, extra…
📺 Podéis ver la entrevista completa que le hice a Matxín la semana pasada en la web de Eurosport.
🎥 Y extractos interesantes de las de Pablo Torres y Juan Ayuso.
👨🏼🎨 Oier Lazkano ya se ha estrenado en concentración con los Redbull-Bora. Está entusiasmado y en su calendario para 2025 figura tanto el Giro, como el Tour y por supuesto las clásicas.
🥁 Os agradezco a todos la paciencia con el ON y OFF de mi podcast Bajo el Maillot. El año olímpico, los hijos y el ajetreo de la temporada -y no necesariamente en este orden- no me ha permitido darle la continuidad que me gustaría, pero ¡vuelvo pronto!
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Merckx es Pogi de mayor.